El martes 18 de agosto la empresa norteamericana despidió a 160 trabajadores de la planta de General Pacheco, incluidos miembros de la Comisión Interna y al Cuerpo de Delegados. Durante el mes de julio de este año los trabajadores tomaron en sus manos la emergencia sanitaria por la Gripe A, ante la desidia de la empresa, que no tomó medida alguna. Con movilizaciones, paros y tomas de las puertas exigieron que se tomen las medidas de higiene necesarias y se de asueto al personal, entre el que ya se contaban varios casos de Gripe A. La empresa justifica los despidos aduciendo hechos de violencia protagonizados por los trabajadores cuando reclamaban estas medidas.
A pesar de que la patronal se agarra de este conflicto para echar a los trabajadores, esta decisión de Kraft-Foods responde a otros motivos, principalmente apunta a descabezar la organización de los trabajadores (despidiendo a su Comisión Interna y el Cuerpo de Delegados) e instalar el horario americano (eliminando un turno).
La política que Kraft quiere imponer en Argentina, está enmarcada en un contexto donde este monopolio de capitales norteamericanos viene imponiendo despidos y flexibilización laboral en la región, a su vez que busca comprar la empresa Stani-Cadbury, por la que ha ofrecido 16.700 millones de dólares.
Ha habido conflictos y despidos en Colombia, Perú y Venezuela. En Argentina, Kraft quiere profundizar el ajuste a como de lugar. Los 160 despedidos son la punta de lanza de lo que vendrá. La empresa desconoce cualquier tipo de intermediación y está decidida a no aflojar, es por eso que violó reiteradamente la conciliación obligatoria dictada por el Ministerio de Trabajo y no deja que los despedidos ingresen a la planta. Incluso a militarizado la fábrica con personal de infantería y caballería, ha instalado cámaras de “seguridad” y cercado todo el perímetro con alambre de púa como si fuera una cárcel.
Frente a los despidos, los trabajadores decidieron el paro y la ocupación de la planta, haciendo entrar a todos los despedidos. A pesar de las maniobras de la burocracia, la patronal y el gobierno que buscaron de todas las maneras posibles derrotar el paro, no pudieron doblegar la fuerza de los trabajadores y tuvieron que recurrir a la policía que realizó un violento desalojo y represión.
Pero tampoco esto frenó la lucha de los trabajadores a pesar de las presiones, las amenazas y la represión policial.
Los trabajadores de Kraft no están solos. Han recibido la solidaridad de compañeros de otras fábricas, organizaciones políticas, sociales, estudiantes secundarios y universitarios, docentes, organizaciones de derechos humanos etc.
Nosotros también podemos ayudar a los trabajadores de Kraft. No podemos quedarnos callados ante semejante atropello de esta empresa, que persigue y ataca a los despedidos y no respeta las leyes argentinas. Desde nuestro espacio, ya sea el colegio, la universidad, tu grupo de amigos o desde nuestro barrio, podemos hacer cosas para ayudarlos, difundiendo el conflicto para que nuestros vecinos conozcan el justo reclamo de los trabajadores.
Otra acción de suma importancia en este momento es colaborar con el Fondo de Lucha. ¿Qué es esto? Es un apoyo monetario para los trabajadores, que es utilizado para sostener las actividades como así también para ayudar a los compañeros que tienen familia, que tienen que comprar comida, que tienen que pagar el alquiler, deudas etc. En este momento es muy importante colaborar con el fondo de lucha, ya que la empresa juega todo el tiempo al desgaste y apuesta a quebrar a los compañeros.
Los trabajadores también necesitan alimentos y ropa. Todo ayuda en este momento, por mínimo que sea.
Desd
e este espacio queremos ayudar a los trabajadores de Kraft. Estamos colaborando con el fondo de lucha y desde el día de hoy nos proponemos recorrer todos los lugares que hagan falta para que se conozca esta lucha. Invitamos a nuestros vecinos a colaborar adquiriendo los bonos o nuestro boletín solidario -lo recaudado será para el fondo de lucha- y juntando alimentos para las familias de los trabajadores y trabajadoras de Terrabusi-Kraft.
Boletín informativo Nº1
Septiembre 2009.
Precio solidario: $0,50
A pesar de que la patronal se agarra de este conflicto para echar a los trabajadores, esta decisión de Kraft-Foods responde a otros motivos, principalmente apunta a descabezar la organización de los trabajadores (despidiendo a su Comisión Interna y el Cuerpo de Delegados) e instalar el horario americano (eliminando un turno).
La política que Kraft quiere imponer en Argentina, está enmarcada en un contexto donde este monopolio de capitales norteamericanos viene imponiendo despidos y flexibilización laboral en la región, a su vez que busca comprar la empresa Stani-Cadbury, por la que ha ofrecido 16.700 millones de dólares.
Ha habido conflictos y despidos en Colombia, Perú y Venezuela. En Argentina, Kraft quiere profundizar el ajuste a como de lugar. Los 160 despedidos son la punta de lanza de lo que vendrá. La empresa desconoce cualquier tipo de intermediación y está decidida a no aflojar, es por eso que violó reiteradamente la conciliación obligatoria dictada por el Ministerio de Trabajo y no deja que los despedidos ingresen a la planta. Incluso a militarizado la fábrica con personal de infantería y caballería, ha instalado cámaras de “seguridad” y cercado todo el perímetro con alambre de púa como si fuera una cárcel.
Frente a los despidos, los trabajadores decidieron el paro y la ocupación de la planta, haciendo entrar a todos los despedidos. A pesar de las maniobras de la burocracia, la patronal y el gobierno que buscaron de todas las maneras posibles derrotar el paro, no pudieron doblegar la fuerza de los trabajadores y tuvieron que recurrir a la policía que realizó un violento desalojo y represión.
Pero tampoco esto frenó la lucha de los trabajadores a pesar de las presiones, las amenazas y la represión policial.
Los trabajadores de Kraft no están solos. Han recibido la solidaridad de compañeros de otras fábricas, organizaciones políticas, sociales, estudiantes secundarios y universitarios, docentes, organizaciones de derechos humanos etc.
Nosotros también podemos ayudar a los trabajadores de Kraft. No podemos quedarnos callados ante semejante atropello de esta empresa, que persigue y ataca a los despedidos y no respeta las leyes argentinas. Desde nuestro espacio, ya sea el colegio, la universidad, tu grupo de amigos o desde nuestro barrio, podemos hacer cosas para ayudarlos, difundiendo el conflicto para que nuestros vecinos conozcan el justo reclamo de los trabajadores.
Otra acción de suma importancia en este momento es colaborar con el Fondo de Lucha. ¿Qué es esto? Es un apoyo monetario para los trabajadores, que es utilizado para sostener las actividades como así también para ayudar a los compañeros que tienen familia, que tienen que comprar comida, que tienen que pagar el alquiler, deudas etc. En este momento es muy importante colaborar con el fondo de lucha, ya que la empresa juega todo el tiempo al desgaste y apuesta a quebrar a los compañeros.
Los trabajadores también necesitan alimentos y ropa. Todo ayuda en este momento, por mínimo que sea.
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e este espacio queremos ayudar a los trabajadores de Kraft. Estamos colaborando con el fondo de lucha y desde el día de hoy nos proponemos recorrer todos los lugares que hagan falta para que se conozca esta lucha. Invitamos a nuestros vecinos a colaborar adquiriendo los bonos o nuestro boletín solidario -lo recaudado será para el fondo de lucha- y juntando alimentos para las familias de los trabajadores y trabajadoras de Terrabusi-Kraft.Boletín informativo Nº1
Septiembre 2009.
Precio solidario: $0,50
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